Una gran ventaja para tu visita de Málaga es que todos los puntos de interés están concentrados en la zona que se conoce como centro histórico, y que prácticamente todas sus calles están peatonalizadas.
Esto propicia una visita muy cómoda y agradable, donde el ambiente de las terrazas de bares y restaurantes se convierten en grandes protagonistas de tu paseo.
Por tanto, lo que deberás hacer es pasear por las calles del centro histórico, el cual se encuentra delimitado por la colina del Castillo de Gibralfaro y la Alcazaba al este, los parques y el paseo marítimo, al sur, y el río al oeste.
El eje principal de tu visita parte de famosa calle Larios, pasando por laplaza de la Constitución, para llegar a la calle Alcazabilla, donde se concentran el Teatro Romano y la Alcazaba.
Una buena forma de iniciar tu visita sería subir al Castillo de Gibralfaro, cuyos orígenes se remontan a la época fenicia, y que forma un conjunto fortificado junto con la Alcazaba, extendiéndose a lo largo de la colina.
Desde lo alto del Castillo de Gibralfaro tienes unas excelentes vistas panorámicas de la ciudad de Málaga, que te permitirán situar y dimensionar tu visita.
La Catedral de Málaga es el mayor monumento que puedes visitar en su centro histórico. Si bien su denominación oficial es Catedral de la Encarnación, popularmente en conocida como la manquita.
En un edificio majestuos0 que muestra una estética exterior muy peculiar, consecuencia de la época de transición arquitectónica en la que se construyó, durante el siglo XVI.
En su interior encuentras numerosos rincones artísticos de distintos estilos, desde el gótico hasta el Renacimiento.
El desarrollo cultural que ha tenido Málaga en los últimos años, con la apertura de nuevos museos, ha cambiado la imagen de esta ciudad andaluza.
De los diversos museos que encuentras en Málaga, desde mi punto de vista estos son los tres más aconsejables de visitar, por orden personal de preferencia.
Museo Picasso de Málaga, donde en doce salas puedes ver una selección muy interesante y hasta curiosa de la obra del artista malagueño, con representación de sus distintas épocas.
Museo Automovilístico de Málaga, con una muestra de 91 coches clásicos de la colección del portugués Joao de Magalhaes, y donde también puedes ver curiosos complementos del mundo del automóvil.
Museo Carmen Thyssen, abierto en la primavera del 2011 en el Palacio de Villalón, del siglo XVI, sobre todo puedes ver pintura española, y en concreto, andaluza, con obras de estilo romántico y costumbrista.
En tu paseo turístico por el centro histórico de Málaga, también tendrás la ocasión de descubrir interesantes rincones.
Fíjate, por ejemplo, en la puerta principal del Mercado de Atarazanas, rescatada de las atarazanas árabes donde se construían y reparaban barcos.
O en los bellos y coloridos edificios del Palacio Arzobispal y la iglesia de San Agustín. Y no pierdas la torre mudéjar de la iglesia de Santiago.
Y no dejes de visitar la plaza de la Merced, o entrar y recorrer el curioso Pasaje de Chinitas, frente a la plaza de la Constitución.
El centro histórico de Málaga te ofrece una amplísima oferta de bares y restaurantes, con sus terrazas, donde poder tapear y comer. Si quieres ir a uno de los bares más típicos, te debes acercar a El Pimpi, cuya terraza puedes ver frente al Teatro Romano.
Y si buscas una zona popular donde apenas encontrarás turistas, has de ir a tapear a alguno de los chiringuitos del antiguo barrio de pescaderos de Pedregalejo, junto a la playa.